Rutina de cuidado de la piel paso a paso
publicado el 23 marzo 2023 por Andressa Maravieski
El cuidado de la piel se refiere a una rutina adecuada de acciones diarias sencillas que deben adoptarse para la higiene facial, la tonificación, la hidratación y la protección.
Tener una rutina de cuidado de la piel adecuada es esencial para prevenir el envejecimiento prematuro y mantener la salud de la piel, ya que está sujeta a la acción del tiempo, el clima, la contaminación, el maquillaje y las condiciones genéticas y biológicas.
En este texto, compartiré una rutina de cuidado de la piel que te ayudará a dejarla bien cuidada.
Identifique su tipo de piel
Antes del primer paso de tu rutina de cuidado de la piel, es esencial saber qué tipo de piel tienes. Esto te ayudará a elegir los productos adecuados para tu piel y a garantizar que tu rutina de cuidado de la piel sea eficaz.
Existen cuatro tipos de piel: normal, grasa, seca y mixta. Consulta a continuación las características de cada uno e identifica tu piel.
a) Piel normal:
La piel normal presenta un equilibrio entre hidratación y grasa. Tiene un aspecto suave, una textura flexible y aterciopelada y pocas imperfecciones o granos.
b) Piel grasa:
Se caracteriza por poros dilatados y exceso de grasa o brillo en todo el rostro, presenta más puntos negros y espinillas y su grosor puede ser más grueso e irregular.
c) Piel seca:
La piel seca se caracteriza por una apariencia opaca, los poros son pequeños e imperceptibles. Es menos elástica, tiene menor capacidad de retención de agua y por lo tanto necesita mayores cuidados.
Es el tipo de piel que tiende a sufrir más con los efectos del envejecimiento, tiene una mayor sensibilidad y está más propensa a alergias y consecuencias de los efectos climáticos.
d) Piel mixta:
La piel mixta es una combinación de piel grasa, generalmente en la “zona T” (frente, nariz y barbilla) con piel seca o normal. Es la más común entre la mayoría de las personas y presenta acné de forma ocasional.
A pesar de las especificidades de cada una, la rutina de skincare es la misma para todos los tipos de piel, los productos elegidos son los que marcan la diferencia.
¡Ahora podemos empezar!
1. Limpieza
La primera parte de nuestra rutina de skincare es la limpieza de la piel. Lavar el rostro con un limpiador suave para eliminar impurezas y suciedad acumulada es fundamental para evitar la acumulación de productos y la obstrucción de los poros.
Este proceso ayudará a preparar la piel para que absorba mejor los beneficios de los cosméticos que utilizará en las fases siguientes.
Los jabones neutros, para bebés o para uso dermatológico son los más indicados para la limpieza facial, además de espumas o geles limpiadores faciales.
Cabe destacar que si su piel está maquillada, es necesario retirar el exceso de productos con un paño húmedo adecuado o con algodón empapado en su desmaquillante preferido antes de limpiarla.
Otra indicación para esta fase de limpieza es la exfoliación que estimula la renovación celular y reduce la oleosidad. Sin embargo, debe realizarse de forma moderada, dos o solo una vez por semana, con especial cuidado para las pieles más sensibles, ya que los productos tienden a ser más abrasivos.
2. Tonificación
El siguiente paso es la tonificación de la piel. Esto ayuda a equilibrar el pH de la piel y prepararla para la hidratación.
Los tónicos o soluciones micelares son productos más acuosos y transparentes que ayudan a eliminar el resto de residuos de suciedad (aplicado con un algodón), a minimizar la apariencia de los poros y reducir la oleosidad.
3. Hidratación
La hidratación es un paso importante en la rutina de cuidado de la piel para mantener la humedad y proteger la barrera natural de la piel. Elija una loción, sérum, crema o mascarilla hidratante adecuada para su cuidado facial.
Las personas con pieles jóvenes pueden optar por hidratantes que combaten el acné, por ejemplo, mientras que las maduras deben recibir tratamiento específico para el área de los ojos y las marcas de expresión.
Puede usar más de un producto en esta etapa de su rutina de cuidado de la piel, sin embargo, aplique desde los más ligeros y líquidos hasta los más densos y cremosos.
Por la mañana, contemple tratamientos antioxidantes (vitaminas y ácidos) y pase al siguiente paso. Por la noche, prefiera tratamientos de renovación celular (los antiedad, aclarantes, hidratación profunda).
4. Protección
La protección solar es un paso crucial en la rutina de cuidado de la piel, ya que ayuda a proteger la piel de los dañinos rayos UV del sol, que pueden causar envejecimiento prematuro, manchas y principalmente cáncer de piel.
Use un protector solar con FPS adecuado (mayor que 15) y reaplique cada 3 horas, especialmente si está expuesto al sol durante un período prolongado y si, en el paso anterior, está utilizando vitaminas y ácidos, que pueden manchar su piel sin la protección solar.
No se deje engañar por los días nublados y por el hecho de que va a pasar todo el día en casa.
Ahora que su piel está limpia, tonificada, hidratada y protegida, puede (o no) aplicar los productos de maquillaje de su preferencia.
En mercados y farmacias cerca de su casa encontrará productos económicos para realizar su rutina de cuidado de la piel.
Consejos que complementan su rutina de cuidado de la piel:
- Recuerde cuidar los labios, el escote, el cuello y las manos con el mismo cariño e intensidad con el que se preocupa por el cuidado facial.
- No pruebe productos o procedimientos estéticos antes de eventos importantes, porque pueden causar enrojecimiento, alergia o descamación.
- Sus hábitos alimenticios, la calidad del sueño, la práctica de actividades físicas regulares y el control del estrés tienen una gran influencia en la apariencia y bienestar de su piel.
- Aplique los productos en movimientos suaves y circulares, evitando tirar o frotar la piel con demasiada fuerza.
- Entre las aplicaciones, espere a que los productos utilizados se sequen o sienta que su piel los absorbe antes de pasar a la siguiente fase.
- La disciplina es la palabra clave para tener una piel saludable. Sin su compromiso, el sueño de tener una piel siempre radiante estará más lejano.
- Lo que funciona para su amiga, conocida o pariente, tiene muchas posibilidades de no funcionar para usted.
- Consulte a su médico dermatólogo para obtener un diagnóstico correcto de su tipo de piel y saber qué productos debe utilizar.
Siguiendo estos consejos simples, puede crear una rutina de cuidado de la piel efectiva que ayude a mantener la salud y la belleza de su piel. ¡Con dedicación, puede tener una piel saludable y radiante!